Partos distócicos

Foto: arbiotech.com.mx

• Los partos distócicos son la suspensión del progreso del parto por anormalidades del respectivo mecanismo. Conozca los factores que predisponen su ocurrencia.

El término distocia se refiere a una dificultad en el parto, que conlleva un riesgo tanto para la madre como para la cría. Su origen está sujeto a diversos factores. Así lo explican Alexandra Gómez Sánchez, Heidy Otero Gómez, Jency Rodríguez Castro y Waira Ospina Castro en un artículo de la Corporación Educativa Nacional.

Un parto de este tipo puede ir desde ligeros retrasos en los procesos, hasta la total incapacidad de la vaca para parir. Este es uno de los más frecuentes problemas reproductivos de los bovinos, ocasionando mortalidad perinatal, terneros débiles con bajo peso al destete, incidencia de enfermedades postparto y disminución de la eficiencia reproductiva.

Las variables identificadas como predictores para las distocias son: número de partos, clima y estación del año si hay en la región, raza, tipo de toro utilizado en la monta, enfermedades previas, entre otras.

El buen manejo de los procesos reproductivos mejora la salud reproductiva, lo que conlleva a una buena rentabilidad lechera. Por ello, los productores ganaderos deben promover la buena generación de prácticas preparto y postparto para evitar las pérdidas por causas relativas a la reproductividad de las vacas o por factores medioambientales.

Entre los factores que predisponen los partos distócicos están:

Sexo: 

Los expertos manifiestan que las probabilidades de requerir asistencia en terneros machos son un 25% mayor que las de las terneras.

Clima:

El clima frío (temperaturas del aíre y vientos fríos entre 5 y 10º C), durante el último tercio se asocia con una mayor ingesta de materia seca, aumentando la concentración de hormona tiroidea, sangre y flujo de nutrientes, lo que ocasiona un aumento de la duración de la gestación y disminuyendo los valores plasmáticos de estradiol, asociado con un aumento de peso al nacer y distocia.

Raza: 

Afirman los autores que más allá de la raza del bovino, se refiere al cruce de razas pues esto puede afectar el tamaño del ternero al nacer. Se considera que un feto es grande cuando su tamaño es mayor que el promedio general de la raza.

Se conoce como feto grande relativo si el diámetro de la pelvis es menor al promedio general de la raza y su estrechez dificulta el paso de un feto de talla normal.

Edad de la madre: 

Es muy importante debido a que en las ganaderías se suele reducir el tiempo en el que la novilla tiene el parto para así cargarla nuevamente.

Para disminuir el riesgo de un parto distócico, el bovino luego de parir debe tener un peso equivalente al 80% del peso adulto, en tanto que en las que lo hacen a los 3 años, este debe ser del 85%.

Ambiente:

Los autores indican que los terneros nacidos en invierno tienen un riesgo de distocia 15% mayor que los terneros nacidos en verano.

Las tasas de partos distócicos en las industrias lecheras con sistemas de confinamiento con genotipos semejantes, tienden a ser altas.

Fuente: Adaptado de CONtexto ganadero.

Lo invitamos a ver el siguiente video sobre una práctica silla para el ordeño:

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