Romosinuano
- Estudio realizado en la Universidad de Sucre indica que esta condición lo habilita para resistir las dificultades de los terrenos inundables y con alta humedad.
Mientras el invierno que se presenta actualmente la mayor parte del territorio colombiano afecta las pezuñas de los bovinos por los fandangos que se hacen en las pasturas por el exceso de agua, en el ganado Romosinuano esto no ocurre porque tiene mayor resistencia en las mismas.
Según especialistas en el asunto, el mal de pezuña se produce porque esta parte del cuerpo se reblandece y el barro con los patógenos genera abscesos y cojeras, por ello el animal se estresa, baja de peso y pierde productividad.
Otro concepto muestra un estudio efectuado por Gean Carlos Arroyo Fernández con el cual optó al título de Zootecnista de la Universidad de Sucre, en el que destaca la alta resistencia de la raza Romosinuano con relación a este tema.
Según el estudio, el ganado Romosinuano por estar adaptado a las zonas húmedas muestra mayor resistencia y calidad de las pezuñas.
Según añade la investigación, esta condición lo habilita para soportar el fango de las inundaciones que suceden periódicamente en el Valle del Sinú, así como en la llanura inundable del Casanare (op cit, 1984).
Indica el estudio que ello es consecuencia de su adaptación a las condiciones del trópico, pues el Romo es resistente al calor, y al mismo tiempo, a la humedad excesiva y otras condiciones desfavorables, como la presencia de parásitos internos y externos.
“Gracias a su resistencia, la raza permite buena productividad en condiciones comúnmente llamadas desfavorables (Sánchez, 1977)”.
De acuerdo con la investigación, esta cualidad proceded de la constitución de la raza. La relación o el ajuste entre los agentes externos (ambiente) y el medio interno (herencia), y es apreciable al exterior por medio del fenotipo, las manifestaciones fisiológicas y patológicas y la conducta o comportamiento en su entorno (Pinzón, 1981).
Fuente: Adaptado de CONtexto Ganadero.
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