Biofertilizantes
- Los biofertilizantes han emergido como una invaluable herramienta en la búsqueda de prácticas agropecuarias más sostenibles y amigables con el medio ambiente. Su aplicación mejora la estructura de los suelos y elimina el uso exclusivo de fertilizantes químicos.
En trabajo investigativo realizado por Luz Estela González de Bashan, Ruth Bonilla Buitrago y Raúl Osvaldo Pedraza para Agrosavia, se plantea que el control biológico, es un enfoque moderno en el control de enfermedades. Sin embargo, a pesar de sus ventajas, los biofertilizantes se enfrentan a significativos desafíos que limitan su adopción y efectividad en la agricultura actual.
Ventajas del uso de biofertilizantes:
Mejora de la fertilidad del suelo: Su aplicación enriquece el suelo con organismos que promueven la descomposición de la materia orgánica y la liberación de nutrientes para el crecimiento de las planas.
Reducción del uso de fertilizantes químicos: Al promover una fertilidad del suelo equilibrada, los biofertilizantes contribuyen a reducir la necesidad de fertilizantes químicos, contribuyendo a una agricultura más sostenible y reduciendo el impacto ambiental.
Protección de las plantas: Los biofertilizantes tienen microorganismos que ayudan a la protección de las plantas contra patógenos y enfermedades, lo que puede disminuir el uso de pesticidas y fungicidas sintéticos.
Restauración del ciclo natural de nutrientes: Al fomentar la actividad microbiana del suelo, los biofertilizantes contribuyen a la restauración del ciclo natural de los nutrientes, lo que a largo plazo promueve la salud del ecosistema agrícola.
Rentabilidad y economía: A largo plazo, los biofertilizantes suelen ser más económicos y rentables que los fertilizantes químicos, lo que beneficia a los agricultores y al medio ambiente.
Protección contra la sequía: Al mejorar la estructura de los suelos y promover la retención de humedad, pueden ayudar a las plantas a resistir mejor los períodos de sequía y las condiciones ambientales adversas.
Limitaciones:
Falta de disponibilidad de cepas adecuadas: Según Bonilla Buitrago, Pedraza y González de Bashan, esta es una de las principales limitaciones para la producción de biofertilizantes. Las cepas elegidas deben ser capaces de sobrevivir en el portador del inóculo, colonizar al hospedero rápidamente y competir con éxito con los factores bióticos y abióticos del ambiente.
Falta de disponibilidad de un portador adecuado: Aseguran los profesionales que si no se dispone del portador adecuado, no es fácil mantener la vida útil del biofertilizante.
Falta de conocimiento de los agricultores: Según González de Bashan, Bonilla Buitrago y Pedraza, no todos los agricultores conocen los biofertilizantes y su utilidad para mejorar el rendimiento de los cultivos. Además, no todos tienen conciencia de los daños que ocasiona la aplicación inapropiada y continua de fertilizantes inorgánicos en el ecosistema.
Recursos humanos inadecuados y personal inexperto: Sostienen los expertos que en muchas ocasiones, agricultores no calificados y personal inexperto no reciben adecuadas instrucciones sobre su aplicación.
Restricciones ambientales: Además, señalan que su uso puede verse afectado por características del suelo, como salinidad, acidez, sequía, etc.
Fuente: Adaptado de CONtexto ganadero.
Lo invitamos a ver el siguiente video que muestra los hidroretenedores:
Siga nuestro canal en Youtube para ver las últimas novedades en el Sector Agropecuario:
Con el patrocinio de: