Errores

Foto: goizper.com

• Sembrar es un momento muy esperado por los productores pecuarios porque esto se convierte en el alimento para los animales. Aprenda sobre los errores más comunes que se cometen al momento de sembrar.

La siembra de semillas para forraje en el invierno permite que los animales soporten las inclemencias del clima que en muchas ocasiones los dejan sin alimento durante largas temporadas de escasez.

Para esto, el proceso de siembra constituye una actividad muy importante para quienes lo realizan, pues en ocasiones se comenten equivocaciones que salen costosas. (Lea: 10 pasos para hacer el establecimiento de una pradera)

La ingeniera agrónoma, Eustorgia Méndez indica que son muchos los factores que influyen para que se cometan errores al sembrar, pero que la acción más frecuente tiene relación con la falta de asesoría de las personas capacitadas.

Cantidad de semillas.

La compra y distribución del material para forraje es el primer paso que debe realizar el productor ganadero para determinar la cantidad de semillas que se van a distribuir en cada terreno.

Según lo afirma Méndez, lo primero es no utilizar las cantidades de semillas adecuadas o recomendada por los expertos, pues en muchos casos, las personas aplican menos de lo aconsejado por ser costoso el material.

Para corregir estos errores, el agricultor o ganadero debe asesorarse de un profesional que le indique la cantidad de kilos de semillas por hectárea, dependiendo del tipo de semilla que se vaya a utilizar.

No utilizar la variedad adecuada.

El tipo de material a utilizar para la siembra es uno de los aspectos más importantes de todo el sistema. En ocasiones, las personas suelen regirse por consejos del vecino o de conocidos que han probado la semilla.

Afirma Méndez que otro error es utilizar alguna variedad no adecuada para la zona, es decir, no lo hacen por las condiciones agroecológicas sino por recomendaciones de un tercero.

Para su corrección, el productor debe buscar la asesoría de una persona capacitada que le indique teniendo cuenta las condiciones agrologicas de cada predio, donde se evalúe el suelo y las precipitaciones.

Protección a la siembra.

Cuando se siembra en un terreno, las semillas son víctimas de los animales e insectos que las aprovechan para comérselas, acabando con la labor del productor.

Asegura Méndez que lo recomendable es proteger las semillas de hormigas y pequeños animales del suelo para que no se las coman y germinen de forma normal. La aplicación del producto protector debe realizarse a tiempo.

Las personas requieren de asesoría previa que recomiende algún insecticida que proteja la semilla de la llegada de animales.

Finalmente, para evitar estos errores es fundamental que se prevea el clima y se atiendan las recomendaciones del Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales acerca del clima, pues se necesita al menos un mes de lluvias para que las semillas puedan germinar o de lo contrario mueren muy pequeñas por falta de precipitaciones.

Fuente: Adaptado de CONtexto ganadero.

Lo invitamos a ver el siguiente video que muestra sembradoras manuales:

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